Indignación




Es la palabra que describe esa sensación y emoción que se genera en quienes toman decisiones a siguiendo el mandato de su conciencia y que por una acción externa de intereses particulares ven cómo lo que para ellos es importante, se pudre.

Indignación es lo que siento desde ayer, mientras veo que llueve a través de mi ventana, hace frío y por televisión se presentan los resultados de las elecciones de primera vuelta.

He vivido 8 años avergonzada del presidente de mi país, de los tratos sucios, de la orden masacres, de los paramilitares, de las FARC, del narcotráfico, de la falta de entendimiento con otros países, de ver cómo el odio llegó a través de su discurso, a tantos corazones.

Soy una ciudadana, cumplo mis deberes y exijo mis derechos, me importa tanto este concepto que suelo incitar a quienes me rodean a que cumplan sus deberes y a que no se dejen de los que quieren pasar por encima de sus derechos. Me gusta debatir ideas, crear, construir y trabajar en equipo. Tengo buenos sentimientos y rechazo el uso de la violencia, la intimidación y el chantaje.

Sé que no me merezco, al igual que muchos jóvenes, mujeres, niños, ancianos y hombres honestos, que Santos sea presidente y menos, si lo es por arte de mafia.

Hipótesis sobre las razones de los resultados:

- Las personas que votaron por el candidato que obtuvo mayor votación piensan que él será la continuación de Uribe. Son personas que no saben que Uribe falló en la mayoría de sus propuestas programáticas y que nunca las tuvieron claras. Son personas que tienen memoria de corto plazo y no han perdido a un familiar en el ejercicio de los "falsos positivos".

- Las personas que votaron recibieron el equivalente a espejos en la época precolombina.
- A las personas que manejan sistemas relacionados con conteo de votos y en sistemas relacionados con votos amarrados, no pudieron resistirse a tomar las tajadas sabrosas de un rico ponqué comprado con narcotráfico, endulzado con deuda externa y sazonado con nuestros impuestos.

Si Santos queda elegido, no será por los ciudadanos colombianos, sino por los mismos que hacen fraudes electorales históricos como el de los 70's, por si no recuerdan a don Misael Pastrana.

Bueno, si sale elegido aquel que no debe ser nombrado nuevamente...

No quiero ver cómo se desprestigia más la bandera poniéndosela en el hombro.
No pienso participar en la guerra contra Venezuela, ni ganar un tour por las bases militares norteamericanas e mi país, ni tener que besarle los pies a un "para" para obtener un cargo que me merezca por mis capacidades.

No quiero andar temerosa, porque hagan seguimiento exhaustivo a este blog, a mi celular o al teléfono de mi casa, porque digo lo que pienso.

No me gustaría vivir en un país en el que no exista ni el espejismo de la democracia y en el que se desencadene nuevamente una guerra civil porque la indignación llegó a convertirse en odio.

Si eso sucede, acepto propuestas de personas de otros países que quieran recibir a una ciudadana colombiana que no pudo rescatar a su país de la porquería.

Si quiere dejar su comentario, envíelo al correo nadiareds@gmail.com o escríbalo sin ningún problema si es seguidor. Lamento las molestias no he podido corregir un error de la plantilla. ¡Gracias!


Comentarios

  1. Sólo agregaría los votos de fuera del país, donde sólo se permite enviar y emitir aquella información que cuente con el beneplácito y la autorización del gobierno.

    Por lo demás, también aceptaría propuestas, jaja

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