El lugar que huele a trago y a orina, lleno de hombres...poco atractivos, nada agradables, sin ninguna cualidad visible.
La tierra del "Rey del Despecho", la mica de Vicente Fernández, el sentimiento vallenato que duele, el deseo del reggaeton.
Paredes sucias, lugar del vómito que no limpió bien, de la cerveza derramada en una pelea, del sudor de la cara del borracho que no se mantiene en pie, del afiche de la mujer en bikini o torcidesnuda e inalcanzable.
La mesa de madera, el piso pegajoso, la luz tenue hacen parte del lugar ideal para quienes beben y pasan allí la mayor parte de su tiempo, dejando de vivir, de creer, de aportar para un país mejor, para convertirse en seres indignificantes, procesadores de líquidos, desgracias y tristezas.
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